FENALCO critica adhesión de Petro a la Ruta de la Seda: «Es una provocación innecesaria a nuestro principal socio comercial»
El gremio de los comerciantes advierte que priorizar afinidades ideológicas por encima de intereses económicos puede afectar el empleo, la seguridad alimentaria y las relaciones con Estados Unidos.
La Federación Nacional de Comerciantes (FENALCO) expresó su profunda preocupación por la reciente decisión del presidente Gustavo Petro de firmar la adhesión de Colombia a la Iniciativa de la Franja y la Ruta, también conocida como la «Ruta de la Seda», durante su visita de Estado a China. Para el gremio, este acto constituye una “provocación innecesaria” hacia Estados Unidos, el principal socio comercial y estratégico del país.
En una contundente declaración, Jaime Alberto Cabal, presidente de FENALCO, afirmó que “cualquier política exterior debe anteponer los intereses del país por encima de afinidades ideológicas o coyunturas políticas”, y subrayó que Colombia no puede darse el lujo de deteriorar relaciones con sus aliados históricos por simpatías políticas con otros bloques económicos.
Cabal recordó que Estados Unidos representa el destino de más del 30% de las exportaciones colombianas, incluyendo productos fundamentales como flores, café, banano y cacao, lo cual genera un superávit comercial superior a los 1.500 millones de dólares para el país. Estos ingresos, agregó, permiten financiar importaciones esenciales como trigo, maíz y otros alimentos clave para la seguridad alimentaria nacional.
Frente a esto, el dirigente gremial contrastó la relación con China, a la que calificó como carente de “solidez estructural”. Según FENALCO, el vínculo comercial con el gigante asiático se basa principalmente en importaciones de bienes manufacturados, sin que exista un flujo relevante de exportaciones colombianas hacia ese país. “La balanza comercial con China es ampliamente negativa”, advirtió Cabal, cuestionando el beneficio real que puede traer una alianza más profunda con ese bloque.
Sobre la afirmación del presidente Petro durante su visita al país asiático —«Vamos a firmar la ruta de la seda», en el marco de la cumbre Celac-China—, FENALCO advirtió que este tipo de anuncios pueden generar incertidumbre diplomática y económica en momentos donde Colombia necesita estabilidad para impulsar la inversión y el crecimiento.
«El comercio mundial no es un juego de suma cero. No se trata de sustituir un mercado por otro, ni de generar tensiones innecesarias con nuestros principales aliados. Estados Unidos sigue siendo nuestro socio estratégico fundamental. Colombia no puede ‘patear la lonchera’», declaró el presidente del gremio.
Cabal también alertó sobre los riesgos de una alineación más estrecha con los BRICS —bloque que agrupa a Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica— si esta se basa únicamente en “coincidencias ideológicas” y no en un análisis técnico de intereses nacionales. “Una aproximación a bloques como los BRICS podría generar consecuencias negativas para la economía y el empleo, como ya ocurrió con errores diplomáticos del pasado”, sostuvo.
FENALCO hizo un llamado a la prudencia y a la responsabilidad del gobierno nacional, insistiendo en que las decisiones en política exterior deben tomarse con una visión de largo plazo, evitando poner en riesgo la estabilidad económica y el bienestar de millones de colombianos.
La adhesión a la Ruta de la Seda se enmarca en la estrategia global de China para aumentar su influencia mediante inversiones en infraestructura y cooperación comercial. Sin embargo, países de América Latina como Colombia, que ya cuentan con tratados de libre comercio y relaciones estratégicas con Estados Unidos, enfrentan tensiones al momento de buscar equilibrios geopolíticos.
Hasta el momento, el presidente Petro no ha respondido a las críticas de FENALCO ni de otros sectores económicos, como la Federación Nacional de Cafeteros, que también advirtió recientemente sobre los posibles efectos adversos de tensiones con Estados Unidos, recordando que el 40% del café colombiano se exporta a ese país.