Según las investigaciones preliminares, los ocho aprehendidos deberán responder ante un juez de la república por los delitos de tráfico de migrantes, concierto para delinquir, cohecho, concusión, contrabando, prevaricato, enajenación ilegal de medicamentos y corrupción de alimentos.
En una operación conjunta realizada en los departamentos de Norte de Santander y Meta, las Fuerzas del Orden capturaron a ocho integrantes de una red criminal dedicada al tráfico de migrantes y contrabando, cuatro de los cuales son policías activos, uno retirado de la misma institución y los tres restantes son civiles.
La información fue dada a conocer por el ministro de Defensa, Pedro Arnulfo Sánchez, a través de sus redes sociales. El alto funcionario explicó que la acción fue coordinada entre la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación, en el marco de una política de ‘cero tolerancia al crimen y a la corrupción’.
Asimismo, precisó que entre los delitos que se les imputarán a los detenidos figuran tráfico de migrantes, concierto para delinquir, cohecho, concusión, contrabando, prevaricato, enajenación ilegal de medicamentos y corrupción de alimentos.
Las investigaciones previas a las capturas permitieron determinar que tres de los aprehendidos tienen vínculos directos con la organización criminal transnacional conocida como ‘El Tren de Aragua’, señalada por las autoridades de infiltrar y corromper instituciones en varios países de la región. Esta estructura delincuencial, originaria de Venezuela, ha expandido sus operaciones hacia Colombia y otros países sudamericanos, especializándose en delitos como tráfico de personas, extorsión y contrabando.
“El resultado no es solo una cifra. Es un golpe estratégico que desarticula una red criminal que lucraba del dolor y la necesidad de personas migrantes, mientras comprometía la seguridad fronteriza del país”, comentó Sánchez en su extensa declaración escrita en X.
Como parte de las acciones judiciales, el Gobierno colombiano solicitó a Interpol la emisión de notificaciones azules para tres integrantes adicionales de la estructura, con el objetivo de ampliar la cooperación internacional y facilitar su captura y sometimiento a la justicia. Mientras tanto, las investigaciones continúan para determinar el alcance de la red y la posible participación de otros funcionarios o particulares.