Cabal denuncia que la “paz total” disparó el reclutamiento de niños y el Huila ya paga las consecuencias
La investigación de María Fernanda Cabal expone datos que muestran cómo el reclutamiento de menores creció bajo la “paz total”, una tendencia que también se refleja en departamentos como el Huila.
En una de las denuncias más fuertes de los últimos meses, la senadora y precandidata presidencial María Fernanda Cabal reveló una investigación que vuelve a poner en entredicho la llamada “Paz Total” del presidente Gustavo Petro. Según documentos oficiales obtenidos por ella ante la Defensoría del Pueblo, desde 2022 —año en que Petro asumió la Presidencia— más de 1.239 niños y adolescentes han sido reclutados por guerrillas, disidencias y estructuras narcotraficantes.
La cifra, que coincide con el periodo inicial de implementación de la política de diálogo con grupos armados, evidencia un patrón sostenido: más violencia, más territorios controlados por criminales y menos protección para la niñez colombiana.
Cabal aseguró que “estas estadísticas confirman que la Paz Total no solo fracasó, sino que abrió las puertas para que los grupos criminales retomaran y expandieran prácticas atroces como el reclutamiento de niños”. Su señalamiento se suma a las recientes alertas de organismos humanitarios que ya advertían un deterioro acelerado de la seguridad infantil.
Disidencias de las FARC y ELN: los principales reclutadores
Los datos consolidados por la Defensoría del Pueblo entre 2021 y 2025 arrojan un total de 1.282 casos de reclutamiento forzado. De estos, 1.239 —el 96,6%— ocurrieron desde 2022, lo que establece una correlación directa con el inicio del Gobierno Petro.
Las organizaciones responsables del mayor número de casos son los terroristas del ELN y las disidencias de las FARC, grupos que han ampliado su presencia armada mientras dialogan con el Ejecutivo.
Entre 2021 y 2025, las cifras revelan que:
- 788 víctimas han sido niños entre 10 y 17 años.
- 492 han sido niñas y adolescentes.
La mayor concentración se registra en menores de 16 años, aunque lo más alarmante es que hay documentados casos de niños reclutados con apenas 10 años, incluso en 2022, 2024 y 2025, pleno periodo del actual gobierno.
Un fenómeno que se agrava: 2024, el peor año registrado
Monitores independientes como la Coalición contra la Vinculación de Niños, Niñas y Jóvenes al Conflicto Armado (COALICO) confirmaron que 2024 superó todos los registros previos, con un incremento que no se veía desde hace más de una década.
El riesgo aumentó de manera sostenida desde 2022, justo después del anuncio del cese bilateral y las negociaciones con estructuras armadas. En muchas regiones, denuncian las autoridades locales, estos grupos aprovecharon los diálogos para fortalecerse y expandir sus corredores estratégicos.
El suroccidente, epicentro del reclutamiento
El ICBF, entre mayo de 2023 y mayo de 2024, identificó tres departamentos donde el fenómeno alcanzó niveles dramáticos:
Cauca – 96 casos
El departamento con mayor afectación. La Defensoría emitió una alerta específica sobre Toribío, convertido por las Disidencias de las FARC en un centro de entrenamiento para menores reclutados. La zona es escenario de una violenta disputa territorial entre el ELN y el Estado Mayor Central.
Nariño – 58 casos
Tumaco figura como uno de los municipios más críticos. El reclutamiento infantil está directamente relacionado con el narcotráfico y las rutas hacia el Pacífico.
Valle del Cauca – 25 casos
El corredor hacia Buenaventura continúa siendo una zona de alto riesgo, impulsado por economías ilícitas y la presencia de múltiples estructuras criminales.
Estos tres departamentos forman un núcleo de crisis donde confluyen cultivos ilícitos, disputa armada y abandono estatal.
La expansión del peligro a otras regiones: Antioquia y Chocó
El fenómeno ya no se limita al suroccidente.
En Antioquia, especialmente en Cáceres, el reclutamiento y las amenazas contra menores han aumentado de forma significativa.
En Chocó, la situación es particularmente grave: Quibdó, Istmina y Tadó registran reclutamientos y asesinatos por parte de GANE y grupos criminales.
Según la Diócesis del Chocó:
- 183 niños fueron asesinados en 2022 tras negarse a unirse a estructuras criminales.
- 127 fueron asesinados en 2023.
Estas cifras confirman que los menores no solo son usados como informantes, mensajeros o extorsionistas, sino que también son víctimas directas de homicidio cuando rechazan ser vinculados.
Alertas Tempranas: más territorios bajo amenaza
Entre 2022 y 2023, el número de Alertas Tempranas que mencionaron el riesgo de reclutamiento aumentó levemente —de 31 a 32—, pero el alcance territorial se disparó: los municipios afectados crecieron un 30%, llegando a 785 municipios, una señal del avance silencioso del control criminal.
El Huila: la nueva alarma nacional en reclutamiento infantil
Uno de los datos más impactantes revelados en la investigación de Cabal, y respaldado por el ministro de Defensa Pedro Sánchez, es el deterioro acelerado en el departamento del Huila, una región que tradicionalmente no encabezaba los indicadores de reclutamiento.
Hoy, las cifras lo ubican entre los cinco departamentos más golpeados del país.
Incremento del 41% en el reclutamiento de menores
El ministro Sánchez confirmó que el reclutamiento en el Huila ha aumentado en un 41% durante los últimos dos años. Este incremento coincide con la expansión de estructuras del EMC y del ELN en corredores del occidente huilense.
Las víctimas provienen mayoritariamente de:
- Municipios del occidente, donde persisten economías ilegales y presencia armada.
- Poblaciones indígenas, particularmente vulnerables a presiones y amenazas.
A pesar de que se han registrado más de 40 denuncias, las autoridades admiten que existe un amplio subregistro, debido al miedo de las comunidades y las limitadas capacidades institucionales.
Recuperación de menores y acciones locales
El Comité Departamental de Prevención de Reclutamiento Forzado del Huila ha logrado recuperar más de 15 niños y adolescentes, quienes actualmente reciben acompañamiento del ICBF, procesos de reintegración y protección.
Sin embargo, las autoridades insisten en que las acciones son insuficientes mientras los grupos armados sigan avanzando sin contención en zonas rurales.
“La Paz Total se convirtió en la paz de los criminales”: Cabal
Para María Fernanda Cabal, estas cifras son la demostración más contundente del fracaso de la política de seguridad del Gobierno. Asegura que la permisividad del Estado ha permitido que las guerrillas “recluten, entrenen, desplieguen y asesinen a nuestros niños sin ningún tipo de consecuencia”.
La senadora insiste en que Colombia enfrenta un deterioro sin precedentes desde la desmovilización de las FARC. Su propuesta, como precandidata presidencial, se centra en restablecer la autoridad del Estado, fortalecer a las Fuerzas Militares y garantizar que “ningún territorio quede bajo el mando de un criminal”.
Una crisis que exige respuestas inmediatas
Los datos revelados son contundentes: la niñez colombiana está más expuesta hoy que hace cuatro años, el reclutamiento se ha multiplicado, y regiones como el Huila, antes periféricas en las cifras nacionales, ahora se encuentran en el eje de la expansión criminal.
La investigación de Cabal no solo expone el drama de cientos de familias; también plantea un desafío urgente al Gobierno: explicar por qué, en nombre de la paz, se ha permitido que los grupos armados refuercen su control sobre los menores de edad.
Mientras la gestión estatal no logre contener este fenómeno, Colombia seguirá sumando víctimas jóvenes a un conflicto que, lejos de disminuir, se ha reconfigurado con una crueldad renovada.

















