La senadora y aspirante presidencial María Fernanda Cabal lanzó un contundente mensaje tras los graves hechos de violencia política ocurridos en Bogotá, en los que fue víctima de un atentado su compañero de partido, Miguel Uribe Turbay. Frente a insinuaciones malintencionadas que han intentado vincularla al ataque, Cabal no dudó en confrontar de frente al gobierno y a sus aliados, acusándolos de manipular la narrativa para victimizarse y desviar la atención de sus propios fracasos.
En un ambiente político cada vez más enrarecido por la violencia, el miedo y la polarización sembrada desde el Palacio de Nariño, la senadora María Fernanda Cabal dejó clara su postura: “Estamos por la paz democrática, no por la violencia electoral”, dijo con firmeza.
Durante una entrevista con La FM, la congresista del Centro Democrático reafirmó que su campaña presidencial continúa, pero que, como muestra de solidaridad y respeto, ha decidido suspender momentáneamente sus actividades proselitistas en respaldo al precandidato Miguel Uribe, quien fue víctima de un atentado sicarial mientras realizaba un acto político en Bogotá.
“Es una suspensión de las actividades políticas como partido… porque consideramos que tenemos una obligación moral y pudor frente a los hechos contra el precandidato Miguel Uribe. Es un acto de respeto por lo sucedido y de exigencia a un gobierno nacional que vive permanentemente estimulando la polarización y señalización”, explicó Cabal.
La “inversión revolucionaria”: así define Cabal la narrativa del Gobierno
La senadora fue enfática al rechazar los señalamientos infundados que algunos sectores han hecho para intentar vincularla con los disturbios alrededor del acto político de Uribe. En especial, Cabal arremetió contra el exalcalde de Medellín, Daniel Quintero, a quien acusó de hacer parte de una estrategia sistemática de tergiversación conocida como “inversión revolucionaria”.
“Estoy acostumbrada a ese tipo de ataques, sobre todo de personas que han ejercido mandatos populares como Daniel Quintero y no solo él, de muchos otros que sienten que el gobierno de Petro no solo es un desastre y es indefendible sino que cualquier cosa que pueda afectarlos, inmediatamente invierten la realidad. Esa estrategia se llama inversión revolucionaria: el muerto se vuelve el victimario”, explicó con crudeza.
Cabal no solo defendió su trayectoria y compromiso democrático, sino que también advirtió que no se dejará intimidar ni distraer por estas campañas de desprestigio. Su prioridad sigue siendo consolidar una propuesta seria para recuperar la seguridad, reactivar la economía y devolverle al país la confianza en sus instituciones.
Cabal acusa a Petro de agravar la polarización
En otro de los momentos más tensos de su intervención, María Fernanda Cabal respondió a las recientes declaraciones del presidente Gustavo Petro, quien aseguró que buscaría moderar su lenguaje para evitar escalar el clima de confrontación. Para la senadora, esas promesas son palabras vacías de un mandatario que ha demostrado ser incapaz de ejercer su rol con responsabilidad.
“El presidente se comprometió a bajarle el tono, pero nadie le cree porque es una persona disfuncional. Es como si usted le entrega un vehículo a un borracho o a un loco… ¿qué pasa? Pues se estrella”, lanzó Cabal, dejando en evidencia su desprecio por lo que considera una presidencia errática y peligrosa para el país.
La aspirante presidencial insistió en que el momento exige unidad entre quienes creen en la democracia, en el respeto por las diferencias y en la necesidad de hacer frente a los discursos de odio que –según ella– son impulsados desde el mismo gobierno nacional.
Una campaña firme frente a la violencia política
Finalmente, Cabal dejó claro que su aspiración presidencial no se detiene, pero sí se transforma ante el momento que vive el país: “Este es un momento para la solidaridad y la decencia política. No vamos a caer en el juego de la violencia ni a permitir que el gobierno utilice este atentado para tapar el desastre institucional en el que nos tiene”, dijo.