Su propuesta incluye la construcción de cárceles en concesión bajo control estatal, la eliminación de beneficios para reincidentes y criminales graves, la separación de reclusos según su peligrosidad y el aislamiento total para terroristas y narcotraficantes.
La precandidata presidencial y senadora del Centro Democrático, María Fernanda Cabal, anunció una ambiciosa reforma penitenciaria con la que busca transformar el sistema carcelario colombiano. Con un enfoque basado en seguridad, disciplina y trabajo obligatorio para los reclusos, la propuesta pretende corregir las falencias del actual sistema, reducir la reincidencia y desmantelar el control que las bandas criminales ejercen desde el interior de los penales.
Bajo el lema #YoNoPrometoYoMeComprometo, Cabal plantea un conjunto de medidas que redefinirían la estructura y función de las cárceles en el país. La iniciativa propone la construcción de nuevas prisiones bajo concesión, la separación estricta de criminales según su nivel de peligrosidad, la imposición del trabajo obligatorio para los reclusos y el fin de los beneficios penitenciarios para reincidentes y criminales de alto impacto.
Principales propuestas del plan penitenciario de Cabal
- Construcción de nuevas cárceles en concesión
Cabal plantea la creación de prisiones de alta seguridad bajo un modelo de alianzas público-privadas, asegurando que no haya hacinamiento y que el control permanezca en manos del Estado. La senadora ha sido crítica con la situación actual del sistema carcelario, donde el sobrecupo supera el 120%, facilitando la operación de bandas criminales desde el interior de los penales. - Trabajo obligatorio para los presos
«Se acabaron los privilegios. Cada recluso trabajará para pagar su comida y alojamiento», afirmó Cabal en su propuesta. Los internos serán obligados a fabricar muebles, cultivar alimentos y producir bienes, una medida que, según la senadora, contribuiría a reducir la carga económica sobre el Estado y a imponer una disciplina estricta en los reclusos. - Separación de criminales de alto y bajo impacto
Con el objetivo de evitar la expansión de redes criminales dentro de los penales, la propuesta de Cabal busca dividir rigurosamente a los presos según la gravedad de sus delitos. «Nada de bandas reclutando dentro de las cárceles. Se dividirá estrictamente a los reclusos para evitar que los delincuentes de menor impacto sean absorbidos por mafias», aseguró la precandidata. - Cárceles de máxima seguridad para terroristas y narcotraficantes
La iniciativa de Cabal propone un régimen de aislamiento total para cabecillas del narcotráfico y grupos armados. «Sin celulares, sin visitas sin control, sin privilegios», afirmó la senadora, enfatizando la necesidad de evitar que estos delincuentes continúen dirigiendo operaciones delictivas desde la cárcel. - Fin de los beneficios penitenciarios para reincidentes y criminales graves
Cabal plantea eliminar las rebajas de pena y la casa por cárcel para quienes han cometido delitos atroces o reincidido en el crimen. «Las cárceles deben ser un castigo real, no una base de operaciones para el crimen», sentenció.
Un nuevo enfoque en la política penitenciaria
La propuesta de Cabal responde a la crisis del sistema penitenciario colombiano, que ha sido señalado por su alto grado de hacinamiento, la corrupción interna y la falta de estrategias efectivas para la resocialización de los reclusos. Con un enfoque basado en el orden y la disciplina, la iniciativa busca cambiar la percepción de las cárceles como «universidades del crimen» y convertirlas en centros de verdadera reinserción o, en el caso de los criminales de mayor peligrosidad, en espacios de total aislamiento para impedir su influencia en el exterior.
El enfoque de Cabal recuerda el endurecimiento de las políticas carcelarias en la región, especialmente el caso salvadoreño, donde el presidente Nayib Bukele ha implementado una estrategia de mano dura contra las pandillas. El CECOT, una megacárcel con capacidad para 40.000 reclusos, ha sido parte fundamental en la política de seguridad de Bukele, que ha reducido significativamente los homicidios en El Salvador.
Aunque el modelo de Bukele ha sido objeto de críticas por organismos de derechos humanos, ha logrado un amplio respaldo ciudadano debido a la drástica disminución de la violencia.
Implicaciones políticas y el debate electoral
El anuncio de esta propuesta refuerza la imagen de María Fernanda Cabal como una figura de derecha con una postura de «mano dura» frente a la criminalidad. En un contexto donde la inseguridad sigue siendo una de las principales preocupaciones de los colombianos, su plan penitenciario podría consolidar su base electoral y atraer sectores que buscan medidas drásticas contra el crimen.
Sin embargo, la propuesta también podría enfrentar resistencia de sectores progresistas y organismos internacionales que han cuestionado enfoques de endurecimiento penal en otros países. La discusión sobre derechos humanos, el riesgo de judicialización masiva sin garantías y el financiamiento de nuevas cárceles serán puntos clave en el debate público.
En la carrera hacia las elecciones presidenciales de 2026, Cabal busca posicionarse como la opción más contundente contra la inseguridad y el crimen organizado. Su propuesta de reforma penitenciaria es un paso en esa dirección, generando una discusión que, sin duda, marcará la agenda política en los próximos meses.