Secuestros y terror en Pitalito: contactaban a sus víctimas por Grindr para asaltarlas y amordazarlas
El horror se apoderó de Pitalito con la captura de dos hombres que durante al menos dos años aterrorizaron a la comunidad LGBTI.
Los delincuentes, expertos en el engaño y el sometimiento, utilizaban la red social Grindr y otras plataformas como Facebook e Instagram para embaucar a sus víctimas, citarlas en sitios seguros para luego someterlas, amordazarlas y despojarlas de todas sus pertenencias.
El Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (GAULA) de la Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, logró la captura de estos despiadados criminales: Martín Emigdio Lasso Vargas, de 32 años, y Sebastián Muñoz Noriega, de 23 años, quienes operaban en Pitalito, Huila. Ambos eran requeridos por el Juzgado Tercero Municipal por el delito de secuestro simple.
El testimonio de una víctima: una noche que se convirtió en pesadilla
Uno de los sobrevivientes de esta banda de secuestradores rompió el silencio y narró cómo lo atraparon en su propia casa:
«Conocí a este sujeto por Grindr y comenzamos a hablar. Era insistente con la idea de vernos, hasta que finalmente lo invité a mi apartamento. Para mi tranquilidad, él mismo pidió que otra persona trajera licor. Cuando llegó el ‘domiciliario’, pidió usar el baño. Al salir, en cuestión de segundos, ambos me agarraron, me pusieron un cuchillo en el cuello, me amarraron y me amordazaron. Se llevaron todo lo que pudieron, mientras yo estaba inmovilizado, rezando para que no me mataran».
Con más víctimas denunciando hechos similares, el GAULA de la Policía tomó cartas en el asunto y siguió el rastro de estos criminales durante dos años hasta dar con su captura.
La cacería del GAULA: así cayeron los secuestradores de Grindr
El coronel Carlos Eduardo Téllez Betancourt, comandante del Departamento de Policía Huila, reveló detalles escalofriantes de la investigación: «Estos sujetos eran verdaderos depredadores. Buscaban a sus víctimas en redes sociales, las convencían con promesas de una noche agradable y, una vez dentro del lugar de encuentro, las sometían con armas blancas, las amordazaban y las dejaban indefensas mientras les vaciaban las cuentas bancarias y se llevaban todo lo de valor».
El macabro modus operandi: seducción, engaño y violencia
Los capturados, con un amplio prontuario criminal que incluye extorsión, lesiones personales y hurto agravado, operaban con frialdad quirúrgica. Engatusaban a sus víctimas con conversaciones amables y encuentros planeados al detalle. Uno de ellos se ganaba la confianza de la persona, mientras el otro aparecía de improviso con la excusa de llevar licor o cualquier otro pretexto. En el momento preciso, sacaban armas blancas y reducían a la víctima en cuestión de segundos.
Estos delincuentes ya están tras las rejas y enfrentarán un proceso judicial por secuestro simple. Sin embargo, las autoridades no descartan que haya más víctimas y pidieron a cualquier persona que haya sufrido un ataque similar que denuncie para que estos criminales no vuelvan a pisar la calle.
Recomendaciones para evitar caer en estas trampas mortales
Las autoridades emitieron un llamado urgente a la comunidad para extremar precauciones al concertar citas por redes sociales. «No se reúnan en lugares privados con personas que apenas conocen, siempre informen a un amigo o familiar sobre su ubicación y desconfíen de quienes insisten demasiado en un encuentro rápido», advirtió el GAULA de la Policía.
La captura de estos criminales es un golpe contra las redes delictivas que acechan a las personas más vulnerables. Sin embargo, la amenaza persiste y la mejor defensa sigue siendo la prevención.